“Hay que buscar grandes acuerdos”

El Presidente de la SNA, Antonio Walker, plantea que están preparando las propuestas del agro para los primeros 100 días del Presidente electo. Recalca que los desafíos seguirán siendo agua, seguridad, aumento de exportaciones y la macrozona sur.

Antonio Walker, el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura SNA, analiza con mirada política y productiva el año que comienza esta semana y que, a partir de marzo, estará marcado por la llegada del nuevo gobierno y el estreno de autoridades. Si bien se rumorean nombres como eventuales ministros de Agricultura, Walker declina nombrarlos y prefiere enfatizar las características que considera claves para quien llene el cargo.

‘Se requiere tener capacidad de generar alianzas, de articular. Por experiencia propia lo digo, una cosa es la autonomía y capacidad que tiene el Ministerio de Agricultura para gestionar e influir, pero lo más importante en un ministro de Agricultura son las alianzas que va creando con carteras que lo puedan ayudar y por Dios qué importante Hacienda, la DIPRES (Dirección de Presupuestos) y Ministerio de Obras Públicas, que en el tema hídrico es clave. Por ello, lo clave es la capacidad del nuevo ministro de articular con los otros ministerios y con el Presidente’, comenta a Revista del Campo El Mercurio.

Insiste en que si se concretan los nombres que se están mencionando para Hacienda —Jorge Quiroz— y Obras Publicas —Martín Arrau— podría ser muy positivo para el sector.

‘Son dos personas que tienen una larga conexión con el agro, por lo que si se dan estos nombres tenemos la oportunidad de tener un gobierno muy con los pies en la tierra, cosa que no es tan común. Este vínculo con gente tan cercana a la tierra podría ayudar a darle un nuevo impulso al sector’, enfatiza.

En su análisis para 2026, esboza las necesidades y desafíos como una continuidad de lo que vivió el sector en 2025 y que, plantea, quedaron reflejadas en las propuestas, establecidas a través de la voz de los 52 gremios que integran la SNA, que entregó a los candidatos presidenciales antes de las elecciones. Los grandes temas, enfatiza Walker, seguirán siendo el agua, la seguridad rural, crecer en exportaciones —a través de la apertura de nuevos mercados— y la macrozona sur.

Algo de eso ya ha conversado con el Presidente electo.

Comenta que el jueves previo a la segunda vuelta viajó a la SAGO en el mismo avión con el en ese momento candidato y que en esa oportunidad, el ahora Presidente electo le pidió que le hiciera un resumen de la propuesta agrícola que la SNA había entregado anteriormente. ‘Nos dijo: ‘Hágannos una propuesta para los primeros cien días. Porque lo que no se hace en 100 días no se hace más”.

-¿Y cuáles son esas propuestas?

-Para eso en el Consejo les pedimos a los 52 gremios que aporten con tres propuestas cada uno.

-¿Algún énfasis?

-Estamos muy esperanzados en que el eje central de su gobierno sea el tema hídrico.

-Cuando hablamos de agua, estamos hablando para el consumo humano, donde tenemos un déficit importante en los sectores rurales desconcentrados; de agua para la agricultura, para la minería, para la generación de electricidad, para el turismo, agua para todos los que tienen relación con ella. O sea, en el fondo, todas las actividades económicas.

-Creemos que sería un gran legado de su gobierno.

-¿Y en particular para el sector?

-Acelerar el paso en la construcción de las grandes obras de riego, como los embalses, de los que hay 26 proyectos en carpeta, las desaladoras, trasvasije entre cuencas cercanas, infiltración de acuíferos y tecnificar, porque todavía tenemos el 50% de la superficie de riego, y recuperar superficie de riego.

Le quiero ofrecer algo al Presidente electo: que usemos la ley de concesiones 11.023. Lo que queremos decirle es que queremos aportar al financiamiento de estas grandes obras de riego, con el aval del Estado.

Esto es urgente. Esto es más que plata. Cuando hablamos de que hay 24 desaladores y 26 proyectos de embalses que no se han hecho, es por un tema de permisología. Y, por ejemplo, para el norte, estamos proponiendo una alianza de casco y chupalla, de agro y minería, para que esta última aproveche el agua desalada, que el agro hoy no puede pagar, y libere para la agricultura el agua existente. Así la minería se convierte en un aliado que aporta a la producción agroalimentaria.

-¿Qué se requiere desde el Gobierno, además del tema hídrico, para que el agro siga creciendo?

-Seguridad rural. Tenemos 263 comunas rurales con una inseguridad que nunca habíamos visto. Las bandas de crimen organizado se fueron a las comunas rurales, donde no hay dotación suficiente de carabineros, de PDI, de fiscales.

-También seguir abriendo nuevos mercados y crecer en exportaciones. Es decir, continuar la política exterior multilateral que tiene Chile, que continuó Boric y que hay que darle continuidad con José Antonio Kast. India, Medio Oriente, Asean.

-¿Y qué pasa con la situación de la macrozona sur?

-El conflicto de la macrozona sur, que es distinto al de la seguridad, es muy grave para la agricultura, porque esa zona es el granero de Chile, ahí está el agua, el clima, el suelo. Porque esa zona tiene un potencial que necesita poder expresarse, lo que tendría un gran impacto social. Es la región más pobre de Chile. Una agricultura grande, fuerte, con empuje, humana y sustentable. Al final, una agricultura rentable es la respuesta más rápida para mejorar la calidad de vida de la gente que vive en los sectores rurales. Entonces, en la macrozona sur tenemos un tremendo desafío. El llamado que yo hago es a unirnos.

-¿Unión solo por eso?

-Lo que pido, como presidente de la SNA, es que en los grandes temas de Chile pueda haber grandes acuerdos políticos. No vamos a derrotar el tema de la seguridad si es que no hay un gran acuerdo político para hacerlo. No vamos a volver a crecer al 4% si no hay un gran acuerdo político para hacerlo. Es muy importante el consenso que ha habido en el mundo político de que la seguridad y el crecimiento económico son dos imperativos morales. Para eso tenemos que recuperar inversión y productividad y eso con una alianza público-privada. Yo me siento con la autoridad moral de hacer este llamado, porque la SNA cumplió 187 años. Entonces, ha sido mucho más que un gremio que habla de agricultura. Este es el llamado que les hacemos a los políticos desde el mundo privado y gremial: buscar los grandes acuerdos para el crecimiento, para la seguridad, para aumentar la inversión, para aumentar la productividad.

-¿Cuál será el rol de la SNA con respecto al gobierno que parte en marzo?

-Los gremios somos puentes. Gremio significa refugio. O sea, nos refugiamos en un gremio para luchar por el desarrollo de nuestro sector. Y no podemos tener color político. Entonces, vamos a hacer con el Presidente Kast lo que hicimos con el Presidente Boric. Siempre tenemos que colaborar con la autoridad. Más allá de la izquierda o de la derecha. Más allá del color político, lo que nos importa como Sociedad Nacional de Agricultura es el desarrollo de la agricultura y los sectores rurales y del país.

Buen año para el agro, pero…

-¿Cómo se perfila el 2026 para la producción?

– Viene un ciclo muy interesante, porque el precio del cobre va a estar sobre US$ 5 y puede ser muy virtuoso para la agricultura. El agro viene con un ciclo muy bueno, con un crecimiento del 7,4%, muy cerca del doble del 4% que creció el resto de la economía.

Entonces, si seguimos con este crecimiento más el precio del cobre, el litio, las tierras raras, las perspectivas son muy positivas.

-¿Cuál es la proyección por rubro?

-El precio de la carne tiene proyecciones de seguir bien, por el aumento del consumo de proteína animal, y se cree lo mismo con el precio de la leche, porque está aumentando su consumo en Asia.

En frutos secos —nuez, avellana europea, ciruela deshidratada y almendras— se está pasando por un buen momento, y tiene para rato. Estamos con proyección de una muy buena temporada en precios.

Por ejemplo, en avellana europea, que tiene mucho que ver con lo que ocurrió en Turquía con la helada, por lo que se está hablando de un precio de US$ 6 y tenemos más de 48 mil hectáreas.

-¿Qué pasa con la competencia de Perú en fruta fresca?

Efectivamente, tenemos algunos problemas por la competencia de Perú en uva de mesa, en paltas y en berries, pero Chile está complementando esas tres especies con un volumen más pequeño y en otras épocas. Somos un complemento con Perú, más que competencia.

Por ejemplo, en el caso de la uva de mesa, ellos tienen 80 millones de cajas y nosotros 60 millones, pero están en otra época y con otras variedades. En uva de mesa la situación puede estar estable. Con los arándanos, ahí nos achicaron, pero puede haber lugares puntuales de Chile donde el arándano ocupa una ventana.

También estamos viendo una muy buena temporada de manzana, muy buena de pera y de kiwis, también bastante bien los carozos en general.

-Cultivos tradicionales, especialmente el maíz y viticultura son dos rubros que vienen muy complicados. ¿El 2026 les traerá mejores noticias?

-Prevemos una temporada muy difícil en trigo y maíz porque los stocks internacionales de grano están muy altos y Argentina se disparó con rendimientos inesperados y que no había tenido los rendimientos que está teniendo esta temporada, entonces eso nos deja con un tema de precios.

A la industria del vino, le quedan un par de años más de arranque. Tuvimos 142 mil hectáreas de uva vinífera. Se han arrancado 25 mil. Tuvimos más de 1.000 millones de litros de vino y ahora estamos en 800 millones de litros. Creemos que en un par de años se tiende a estabilizar, porque tenemos que llegar a las 90 u 80 mil hectáreas.

Relación con el gobierno

‘Quiero destacar que como gremio tuvimos una muy buena relación con el Minagri del Presidente Boric, tanto con el exministro Esteban Valenzuela como con la actual ministra, Ignacia Fernández, así como con los servicios. Si algo tenemos que aprender es que no solo los dos de Agricultura, sino que muchos ministros, de Hacienda, Economía, Seguridad, fueron muy cercanos. Y valorar que el Presidente Boric le dio continuidad a la política exterior basada en la multilateralidad’.
‘Lo clave es la capacidad del nuevo ministro de articular con los otros ministerios y con el Presidente’.